Sasha Grey (23 años) y Madison Young (31 años) son dos estrellas de la escena del porno planetario y, además, son dos mujeres que se han empeñado en romper algún que otro cliché. Eso ha desatado las iras no solo de los puritanos de toda la vida (cosa previsible) sino también de más de uno dentro del mundillo del sexo explícito. El mes pasado Grey (que lleva dos años retirada del cuerpo a cuerpo y ahora trabaja como actriz convencional) participó en un programa de lectura en la escuela infantil Emerson, en Compton, California, lo reveló la web TMZ.com. Por su parte, Madison Young lleva la galería Femina Potens (se traduce del latín como ‘la mujer puede’ o ‘la mujer capaz’). En verano, semanas después de haber dado a luz, montó una exposición que giraba sobre una imagen suya dando el pecho a su niña. La foto formaba parte, junto con otras 12 obras, de la muestra Becoming MILF que en español (y dicho de manera bastante más suave que en inglés), vendría a querer decir ‘Convertirse en una madre sexualmente atractiva’. Una colega de profesión, no tan famosa, eso sí, la acusó de alimentar las mentes de los pedófilos.
El pecado cometido tanto por Grey como Young ha sido el de salirse del arquetipo de actriz porno. «Soy actriz, soy artista, soy hija, soy hermana, soy una compañera. Tengo un pasado con el que alguna gente puede no estar de acuerdo, pero eso no define quién soy», ha dicho la primera en un comunicado.
Madison Young, mediante un correo electrónico, va en la misma línea: «Es difícil entender por qué ciertas personas se sienten incómodas al pensar en madres con vidas sexuales placenteras o con una identidad sexual. Por experiencia sé que aquellos que vivimos fuera de cajas compartimentadas tendemos a hacer que el público se sienta confuso e incómodo. En general el público suele preferir que tengamos roles e identidades únicas: Madre/ amamantadora; Niña / femenina; Niño / masculino. (…). La gente tiende a ver las cosas o blancas o negras y no los muchos matices de gris que en realidad existen. Somos individuos multidimensionales con identidades complejas que varían en diferentes puntos de nuestras vidas».
En su galería, Young organiza talleres y exhibiciones que reflexionan en torno a la identidad sexual (homo, hetero, bi…) y el rol de género (masculino, femenino…) . Es lo que hizo con la polémica fotografía citada (que la actriz realizó en colaboración con Malia Schlaefer): «En ella hago referencia a la famosa imagen de Marilyn Monroe tomada por Richard Avedon y uso ese icono sexual para explorar mi propia identidad cambiante: del icono sexual feminista a la madre lactante. Es un retrato que permite al espectador acceder a un momento de transformación y cuestionamiento, de miedo a lo desconocido. Un duelo por el pasado y un vistazo al futuro. Esta obra también tiene reminiscencias de las Untitled Film Stills de Cindy Sherman, en las que [la fotógrafa] se autorretrató como estereotipos o personajes tales como ‘el ama de casa’, ‘la actriz’, ‘la mujer en tensión’ para tratar de explorar estos personajes diferentes que existen en el interior de todas nosotras».
Jean Baudrillard, Nietzsche, Brecht, Jean-Paul Sartre, la Internacional Situacionista… estas son algunas de las influencias que cita Sasha Grey en una de sus webs. No da pues el perfil de lo que, ramplonamente, se supone que debe ser una actriz porno. De ese intelectualismo (que quizá tenga un punto forzado) Grey está transitando ahora hacia otros derroteros. «Creo que la educación es un derecho universal. Estoy comprometida con este programa [de lectura en escuelas] y entiendo que la gente tenga sus opiniones sobre lo que he hecho y lo que represento».
Madison Young detecta «un nuevo nivel de control, potenciación y conciencia» en la industria del cine para adultos, una conciencia que «es parte del movimiento del sexo positivo y del porno feminista». No es esnobismo, asegura, sino un nuevo ecosistema que crea «un espectro de diversidad, comunicación, placer y autenticidad que ha estado ausente del manido porno fast-food«.
Interesante! 😀